El mundialmente conocido DJ David Guetta hizo vibrar Valencia el pasado 25 de julio con su show «The Monolith» en el Estadio Ciutat de València. Con más de cuatro horas de música y efectos visuales alucinantes, Guetta ofreció una experiencia sensorial inolvidable. Más de 18.000 personas asistieron a este espectáculo que ya se perfila como uno de los eventos más destacados del año en la ciudad.
«The Monolith» es el único big show que David Guetta ha traído a la Península, y se convierte en una producción exclusiva creada especialmente para esta ocasión. Este espectáculo ha sido cuidadosamente diseñado para ofrecer una experiencia única e irrepetible, combinando una impresionante puesta en escena con tecnologías de última generación. La velada estuvo marcada por una atmósfera inmersiva que envolvió al público en sonidos potentes y envolventes, acompañados de un despliegue visual deslumbrante, donde las luces láser y los efectos visuales se sincronizaron a la perfección con la música. Además, las espectaculares exhibiciones de pirotecnia añadieron un toque aún más impactante, haciendo de la noche una experiencia inolvidable para todos los presentes.
La noche arrancó con una selección de DJs teloneros que se encargaron de encender el ambiente y preparar a la multitud para el momento más esperado: la llegada de David Guetta. Los teloneros ofrecieron sets llenos de energía, calentando motores y manteniendo al público en un estado de expectación máxima. Finalmente, cuando el reloj marcó las 00:00 horas, el que muchos consideran el mejor DJ del mundo hizo su aparición triunfal sobre el escenario. Su entrada desató una explosión de entusiasmo entre los asistentes, quienes ya estaban más que preparados para lo que sería una de las noches más memorables del año.
Un espectáculo audiovisual impactante
De la mano de Global Live Entertainment SL, productora del espectáculo y Fluge Audiovisuales, quién suministró el equipamiento de sonido, iluminación y vídeo, convirtiendo el espectáculo audiovisual en un show sencillamente asombroso. El montaje escénico incluyó una pantalla LED gigante, con un diseño en forma de cubo que dominaba el escenario, creando una sensación visual impactante. A esto se sumó un sistema de sonido envolvente que amplificaba cada nota y ritmo, haciendo que la música se sintiera en todo el cuerpo. Los efectos pirotécnicos añadieron un nivel extra de emoción, iluminando el cielo y complementando los potentes visuales. Todo esto se combinó para ofrecer una experiencia inmersiva única, que hizo que el público viviera el show de una manera completamente nueva y envolvente.
En cuanto a la iluminación del evento, las 24 luminarias Ayrton Cobra Láser fueron una de las grandes sorpresas del espectáculo, llevando el show de David Guetta a otro nivel. Estos impresionantes focos móviles brindaron una precisión y potencia visual fuera de lo común, proyectando beams de luz de una nitidez casi hipnótica que atravesaban el cielo recorrían el estadio en sincronía perfecta con cada beat. Los efectos láser de los Ayrton Cobra crearon un espectáculo lumínico envolvente, llenando el espacio y transformando el escenario en una experiencia visual inmersiva. Su capacidad para moverse y cambiar de dirección con tanta rapidez hacía que pareciera que la luz misma bailaba al ritmo de la música, potenciando la atmósfera futurista del show y cautivando al público en cada momento.
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